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El novillero francés El Rafi cortó dos orejas y el rabo de forma simbólica tras lograr el indulto del sexto novillo de la tarde. Rodrigo Jiménez

El festival taurino a beneficio de los afectados de esclerosis múltiple de La Flecha tiene tirón

El Rafi triunfa y logra el indulto de un novillo en el lleno de la cubierta de Arroyo con seis orejas y un rabo

Jota De la Fuente

Arroyo de la Encomienda

Lunes, 17 de febrero 2020, 20:34

El primer festejo taurino de la temporada en Castilla y León, celebrado en la tarde de ayer en la plaza de toros cubierta de La Flecha, en Arroyo de la Encomienda, sirvió para ver el triunfo del novillero francés El Rafi, que armó el taco y logró el indulto del sexto astado de la tarde, el que cerraba cartel. El VI festival taurino benéfico de La Flecha llenó las 3.200 localidades del aforo, cuyos beneficios irán destinados a los enfermos por la esclerosis múltiple.

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El Rafi fue el triunfador de la tarde con las dos orejas y el rabo simbólicos de Cerecillo, novillo indultado por la presidencia de la ganadería de Juan Manuel Criado, marcado con el número 7 y nacido en enero de 2017. Toñete también cortó dos orejas a su novillo, mientras que El Fandi y Pablo Aguado recibieron un apéndice en ambos casos tras sendas faenas saneadas. Cayetano Rivera y Emilio de Justo completaron el cartel y resultaron ovacionados sin llegar a tocar pelo.

El novillero francés nacido en Nimes, El Rafi, fue el triunfador de la feria de Valencia del año pasado, donde repetirá este año, además de la de Sevilla, donde ya está anunciado. Tras su triunfo de la tarde de ayer en La Flecha, estará el próximo día 29 de febrero en Aranda de Duero.

Valiente, decidido y voluntarioso

El Rafi recibió de rodillas con el capote a Cerecillo en el inicio de su faena, poniendo emoción entre el respetable al perder la defensa. Se mostró decidido y voluntarioso, y la primera de las orejas ya la había ganado prácticamente al capote antes y después de picar al novillo, muy valiente con varias tandas que levantaron de sus asientos a los más de tres mil espectadores presentes.

El Rafi comenzó a fraguar su triunfo con el capote ante Cerecillo, nombre del novillo indultado. Rodrigo Jiménez

En la faena con la muleta, las dos primeras tandas al natural, hincando la rodilla, anunciaron lo que estaría por llegar. Destacables también fueron las dos siguientes por la izquierda, pero lo mejor lo tenía Cerecillo al natural, donde volvió el francés, con mucho más recorrido y pases largos que remató con la zurda. La última tanda de rodillas comenzó con el runrún del indulto entre el público, que comenzó a pedirlo tímidamente.

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Primer indulto de la historia del coso de La Flecha

Con el estoque en la mano, el toro quiso más tandas. El Rafi tiró el estoque al albero, volvió a dar pases al natural y ahí sí la petición fue sonora y unánime, hasta que el presidente sacó el pañuelo rojo del indulto, el primero de la historia en el coso arroyano. De ello darán fe como testigos los 3.200 espectadores, el presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar y el alcalde de Arroyo, Sarbelio Fernández, presentes en la cubierta de La Flecha junto al exalcalde de Valladolid, Javier León de la Riva. La Banda Sinfónica de Arroyo fue la encargada de poner el acompañamiento y la nota musical a la tarde con sus pasodobles.

Dos orejas para Toñete

El predecesor de la faena de El Rafi, Toñete, había cortado dos orejas en el quinto de la tarde, con ganas de mejorar las faenas de sus predecesores. Pecó de precipitación queriendo hacer las cosas más rápido de lo que pedía el astado. Serenó el ritmo, encontró el punto, comenzó a gustarse y tras una buena estocada cortó dos apéndices.

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El Fandi abrió la tarde con un público deseoso de premiar cualquier atisbo de calidad. Así lo logró el granadino en su especialidad, las banderillas. Con la muleta y tesón arrancó los primeros aplausos del respetable hasta terminar con su animal de una larga estocada y descabello que le sirvió para cortar la primera oreja de la tarde, quizá algo generosa.

Pablo Aguado fue el cuarto de la tarde y quien también cortó una oreja, que bien pudieron ser dos si hubiera estado más acertado con el acero. El pinchazo que precedió a una profunda estocada evitó el doble trofeo, tras una faena redonda que tuvo un pequeño susto tras un enganchó en la muleta, entrando a matar en el minuto de mayor sobrecogedor silencio de la tarde.

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Cayetano Rivera estuvo presente sobre el coso de La Flecha en su regreso a los ruedos. Rodrigo Jiménez

Emilio de Justo y Cayetano Rivera fueron ovacionados. En el caso del primero tras una faena muy trabajada pero perdiendo la posibilidad de recibir mayor premio al entrar a matar, mientras que el madrileño Cayetano Rivera, que es de los toreros que solo con su presencia en el ruedo tienen ganada buena parte de la gradería no aprovechó al segundo de la tarde. Pese a todo hubo ligera petición de oreja.

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